miércoles, 31 de agosto de 2011

Tener un blog

Es curioso esto de tener un blog. Casi casi se podría decir que es como un tamagochi... al que tienes que alimentar para que su salud sea propicia.

La verdad es que me encanta escribir aquí... porque así plasmo mis pensamientos en una especie de diario personal público... a veces juego a escribir cosas sin pensar que cualquier otro va a leerlo... pero... tantantan... entonces voy a Estadísticas y compruebo que hay personas que me leen... personas en todo el mundo... y aún me pregunto... quien ha estado en EEUU durante julio y parte de agosto... ;o)

Últimamente me han llegado algunos inputs...
a) hay gente que no sabía que era yo la que escribía el blog (y con este post estamos poniendo remedio),
b) que depende del título del post y de la frase que se puede añadir al publicar en facebook motiva más a la lectura o no (que sepáis que el post "Sirvent i l'orxata" se lleva la palma!!),
c) que los colores que había dificultaban la lectura en un iphone (por eso he hecho algún cambio en el formato que espero ayude a solucionar la dificultad).

Y así van llegando feedbacks... de cosas bonitas y de cosas a mejorar... como pececitos para las focas... qué bonitos pececitos!!

Gracias a todos y todas!!! :D

jueves, 25 de agosto de 2011

Company entre companys

Aquest estiu he fet un petit recorregut per un dels espais més increïbles en el que jo he estat: Aigüestortes!!

Però avui no en parlaré d'Aigüestortes... em reservo per quan trobi el cable pertinent i pugui descarregar les fotos que he fet. El que vull fer ara és parlar del que no he pogut plasmar amb la càmera de fotos... i que també he trobat durant els Semicarros de foc que hem fet.

Aquest Agost he anat des d'Espot fins a Arties, fent nit a "Amitges", "Saboredo", "Colomers" i "Restanca". I durant aquests 4 dies que han estat com 3 setmanes ens ha passat de tot... hem estat missatgers de l'amor, hem caminat per camins entortolligats que es convertien en rierols i un altre cop en camí. Hem caminat entre pedres gegants caigudes de no sé benbé on. Hem disfrutat i patit, hem rigut i descansat. Hem menjat i dormit, ens hem dutxat per dos euros i hem begut alguna llauna per 3. Hem jugat al Set i hem practicat anglès. Hem fet tantes coses que aquesta llista podria allargar-se durant dues pàgines més.

Només volia agrair... haver disfrutat d'un espai on els valors i manera de fer són generoses i respectuoses (mentre els roncs no ho impedeixen, claro... però als roncs hi dedicarem un altre post).
Només volia agrair la gent estupenda que he trobat durant aquests 4 dies.
Només volia agrair el company de ruta al que l'Univers m'ha enviat.
Només volia agrair el company entre companys.

Com diu el tercer principi del Reiki: "Sólo por hoy agradece lo que tienes".

Quan pots ser tu sense més, sense tu, sense els altres... y puedes ver con los ojos cerrados.

lunes, 8 de agosto de 2011

Cuento del niño

Este fue uno de los primeros cuentos que conté:

Cuento del niño

Adaptación de Cecilia Almarza

Una vez un niño fue a la escuela y era bien pequeño y la escuela era bien grande, pero cuando el niño vió que podía ir a su clase directamente desde la puerta de afuera, se sintió feliz y la escuela no le pareció tan grande.

Una mañana, cuando él hacía poco que estaba en la escuela, la maestra dijo: —Hoy vamos a hacer un dibujo —¡bien!— Pensó el niño y a él le gustaba dibujar y podía hacer todas las cosas: soles, leones, gatos, gallinas, vacas, trenes y barcos y tomó su caja de lápices de colores y comenzó a dibujar.

Pero la maestra dijo: —¡Esperen! No es hora de comenzar— y él esperó hasta que todos estuvieron listos. —Ahora vamos a dibujar flores— dijo la maestra.

—Bueno— pensó el niño. A él le gustaba dibujar flores. Y comenzó a hacer bonitas flores con lápiz rosa, naranja, azul. Pero la maestra dijo: —Esperen, yo les mostraré como se hacen. ¡Así!— Y era una flor roja con tallo verde. —Ahora sí— dijo la maestra —Ahora pueden comenzar.

El niño miró la flor de la maestra y luego la suya. Y a él le gustaba más su flor que la de la maestra. Y no reveló esto. Simplemente guardó su papel e hizo una flor como la de la maestra, roja y con el tallo verde.

Otro día, cuando el niño abrió la puerta de afuera, la maestra dijo: —Hoy vamos a trabajar con plastilina.
—¡Bien!— pensó él. Y podía hacer todo tipo de cosas con plastilina: culebras, muñecos, elefantes, autos y camiones. Comenzó a apretar la bola de plastilina.
Pero la maestra dijo: —¡Esperen! No es hora de comenzar— Y él esperó hasta que todos estuvieron listos. —Ahora— dijo la maestra —nosotros vamos a hacer una víbora.
—¡Bien!— pensó el niño. A él le gustaba hacer víboras y comenzó a hacer unas de diferentes tamaños y formas.
Pero la maestra dijo: —¡Esperen! Yo les mostraré como hacer una víbora larga —Ahora pueden comenzar.
El niño miró la víbora larga de la maestra, entonces miró la suya y a él le gustaba más la suya que la de la maestra, pero no reveló esto. Simplemente amasó la plastilina en una gran bola e hizo una gran vibora larga como la de la maestra.

Así luego el niño aprendió a esperar y a observar y a hacer las cosas como las de la maestra y luego él no hacía las cosas por sí mismo.

Sucedió que el niño y su familia se mudaron a otra casa en otra ciudad y el niño tuvo que ir a otra escuela.

Esa escuela era mucho más grande que la primera, tenía rejas afuera y para llegar a su salón el niño tenía que subir escaleras y seguir por una corredor largo. Y justamente el primer día que él estaba allí, la maestra dijo: —Hoy vamos a hacer un dibujo.

—Bien— pensó el niño y esperó que la maestra le dijera que hacer. Pero ella no dijo nada, apenas andaba por el salón.

Cuando se acercó al niño ella dijo: —¿Tú no quieres dibujar? —Sí —dijo el niño—, pero ¿qué vamos a hacer?
—Yo no sé hasta que tú lo hagas— dijo la maestra.
—¿Cómo lo haré?— preguntó él. —¿Por qué— preguntó la maestra —de la manera que quieras. —¿Y de cualquier color?— dijo él.
—De cualquier color— dijo la maestra —Si todos usasen los mismos colores e hiciesen el mismo dibujo ¿cómo se podría saber quién hizo qué y cuál sería de quién?
—Yo no sé— dijo el niño y comenzó a hacer una flor roja con el tallo verde.


(Raimundo Dinelo)

domingo, 7 de agosto de 2011

ells mai no ho farien...

Esta noche, mientras iba en la moto, he visto algo en el suelo... a medida que me acercaba he comprobado lo que me temía... en medio del carril de al lado había un gatito estirado, no se movía... estaba muerto, atropellado, era jovencito, atigrado y europeo.

(Inciso: utilizo el género masculino por uso lingüístico convencional, ya que al desconocer el sexo del minino podría estar utilizando todo el rato algo como "el/la posible gatito/a", però no quiero que se haga eterno este post ... so, go on).

Al bajar la velocidad, he podido ver como otro gato con las mismas características se dirigía por el mismo carril hacia el cuerpo... iba lento y sigiloso, como disimulando y aunque una pareja de personas lo seguían a la escena del crimen, parecía no importarle... hasta que ha estado lo suficientemente cerca como para olisquear a su compañero, y ha sido entonces cuando se ha ido corriendo dejando que la presencia humana lo espantara.

Esto me ha hecho acordarme de que en 5 días hará justo un año que aparecieron en la calle del pueblo donde veranea mi madre 3 gatitos abandonados. Después de periplos varios, operaciones de castración (por eso la oreja sesgada), y otras andaduras... mi madre adoptó a uno de los gatos... de hecho, a una de las gatas, se llama Lluna... es bonita, bonita... Luna, Lunera!!!



Y ya aprovechando pues... un pequeño homenaje a García Lorca, con una de las poesías que recité por Sant Jordi en el cole, every year, one poem:

ROMANCE DE LA LUNA LUNA

La luna vino a la fragua
con su polisón de nardos.
El niño la mira, mira.
El niño la está mirando.


En el aire conmovido
mueve la luna sus brazos
y enseña, lúbrica y pura,
sus senos de duro estaño.


Huye luna, luna, luna.
Si vinieran los gitanos,
harían con tu corazón
collares y anillos blancos.


Niño, déjame que baile.
Cuando vengan los gitanos,
te encontrarán sobre el yunque
con los ojillos cerrados.


Huye luna, luna, luna,
que ya siento sus caballos.


Niño, déjame, no pises
mi blancor almidonado.


El jinete se acercaba
tocando el tambor del llano.
Dentro de la fragua el niño,
tiene los ojos cerrados.


Por el olivar venían,
bronce y sueño, los gitanos.
Las cabezas levantadas
y los ojos entornados.


Cómo canta la zumaya,
¡ay, cómo canta en el árbol!
Por el cielo va la luna
con un niño de la mano.


Dentro de la fragua lloran,
dando gritos, los gitanos.
El aire la vela, vela.
El aire la está velando.

jueves, 4 de agosto de 2011

realitats ensomniades

Aquest matí he obert els ulls i he caminat.

Cossos nus m'han envoltat... no ho he entès però ho he acceptat i he seguit caminant... fins que he arribat davant d'una esplanada negre que em volia engolir... he tingut por.

Tenia por però també volia ser absorvida i abraçada per aquella massa negra... així que... ho he fet... hi he entrat... i m'ha abraçat... la sensació era bonica i fresca... i tot i que era negre com el petroli i pensava que m'hauria fet desaparèixer... jo encara hi era, si em mirava... encara era jo, allà... dins de l'aigua... magnífic despertar!!!